
En esta nueva columna, abordamos los principales enfoques del pensamiento actual y sus resonancias en lo político y lo social
Desde su nacimiento como Nación, nuestro país promueve la interculturalidad donde la diversidad convive en un mismo espacio
ClavesLa Argentina fue uno de los países de América que más inmigrantes recibió en el período de emigración de masas. Si bien en términos absolutos la cantidad de inmigrantes que se instalaron en el país entre 1880 y 1930 fue inferior a la de los que se dirigieron a los Estados Unidos, nuestro país que tuvo la mayor proporción de extranjeros con relación a su población total. De acuerdo a los datos del censo de 1914, una tercera parte de los habitantes del país estaba compuesta por extranjeros.
A partir de la promulgación de la Ley de Migraciones Nº 25.871, en el año 2004, empezó un cambio de paradigma en la gestión de la movilidad humana en la República Argentina que pasó a centrarse en la persona migrante, entendiéndola como sujeto de derechos, y al mismo tiempo estableciendo el acto de migrar como un derecho humano que el Estado debe garantizar bajo los principios de igualdad y universalidad.
La Ley de Migraciones establece los principios y lineamientos de la actual política migratoria, entre los que se encuentran dar cumplimiento a los compromisos internacionales asumidos por la República Argentina en materia de derechos humanos, movilidad e integración de las personas migrantes a la sociedad. Asimismo, consagra la igualdad de derechos entre nacionales y extranjeros (trato nacional) y establece que el acceso a la salud y a la educación deben ser garantizados por el Estado, independientemente de la situación migratoria del migrante, entre otros derechos allí reconocidos.
Argentina es uno de los pocos países miembro de las Naciones Unidas que ha suscrito y ratificado los 18 tratados internacionales de derechos humanos. Muchos de ellos tienen rango constitucional en nuestro país, lo que demuestra el compromiso de nuestro Estado con los mismos.
La interculturalidad que promueve la República Argentina desde su nacimiento como nación, donde conviven diferentes culturas en un mismo espacio, apostando por la interacción entre ellas sin la supremacía de ningún grupo cultural; dicha interculturalidad se basa en valores como el respeto a la diversidad, el crecimiento de cada grupo y la debida integración de todos sus miembros, se ve empañada por las recientes declaraciones de la Vicepresidente de la Nación, Victoria Villarruel, en el sentido que “ningún país colonialista nos va a amedrentar por una canción de cancha ni por decir las verdades que no se quieren admitir. Basta de simular indignación, hipócritas...”.
Se suma a ello la polítíca internacional de alineamiento de los hermanos Milei que nos involucra peligrosamente en conflictos bélicos que ocurren a miles de kilómetros de nuestro país.
Desde su nacimiento, nuestro país adoptó como política de estado internacional el NO alineamiento, es decir la tercera posición, que significa una definición superadora de los antagonismos ideológicos y políticos, que promueve los ideales de justicia social, independencia económica y soberanía, en un marco de libertad y dignidad humanas, los que se compadecen con los principios y valores fundacionales de nuestra Patria.
En esta nueva columna, abordamos los principales enfoques del pensamiento actual y sus resonancias en lo político y lo social
Guido Zatloukal, presidente de la Fundación Blockchain Argentina, aclara conceptos clave para disipar ciertas ideas confusas que circulan por la reciente promoción del proyecto cripto $LIBRA desde la cuenta oficial en X del presidente Javier Milei
El debate sobre el wokismo no es solo una discusión lingüística o cultural, sino una ventana a las luchas de poder que moldean nuestra sociedad
Tragedia, abandono y pulseada política
Este miércoles se dará la marcha multitudinaria en apoyo a los jubilados. Estarán los de siempre, que pelean contra el gobierno desde el comienzo, pero además habrá invitados especiales
El Congreso de la Nación fue el epicentro de dos escenarios que expusieron, una vez más, la crisis política y social que atraviesa Argentina
“¿Por qué no contribuye el que más tiene?”, fue la pregunta planteada en una nueva presentación del Foro Economía y Trabajo que se realizó en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA)